DECLARAN PATRIMONIO CULTURAL A OBRA MUSICAL DE CANTAUTOR ANCASHINO
Se trata de Jacinto Humberto Palacios Zaragoza
La obra musical de Jacinto Humberto Palacios Zaragoza, natural del distrito y provincia de Aija, región Áncash, fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación por el Ministerio de Cultura, en reconocimiento a su trayectoria artística y trascendencia de su obra como compositor.
El Ministerio de Cultura afirma que la obra musical de Palacios Zaragoza "se ha configurado como uno de los pilares constitutivos de la memoria histórica, la cultura musical e identidad del pueblo ancashino y peruano". Así lo precisa la Resolución Viceministerial Nº 165-2015-VMPCIC-MC, publicada hoy en el Boletín de Normas Legales del Diario El Peruano.
El considerando de la norma indica que Palacios Zaragoza nace el 26 de de julio de 1900 en la Villa de Aija, capital de la provincia de Aija. Durante su etapa juvenil aprende a tocar la guitarra, convirtiéndose en un reconocido miembro de la bohemia local. En 1929 se muda a Lima y se dedica a dar clases de guitarra y ofrecer presentaciones musicales en teatros y coliseos.
Destaca la versatilidad que tuvo Palacios Zaragoza para integrar y dirigir una variedad de conjuntos musicales a lo largo de su trayectoria musical, manejando complejas alineaciones instrumentales que incluían arpa, guitarra, violín, mandolina y concertina. También destacó su maestría en la ejecución de la guitarra.
Asimismo, era capaz de utilizar diferentes afinaciones en las cuerdas de acuerdo al tema que iba a interpretar “porque igual sabía tocar en temple común, arpa, baulín, huamaliana, amado o cruzado o diablo”, indican los estudiosos.
Su destreza interpretativa junto con la versatilidad de su repertorio conformado por valses, huainos, marineras y yaravíes, le permitieron construir una sólida trayectoria musical como solista, manteniendo una presencia constante en espacios como el Coliseo Nacional de Lima, donde compartió escenario con figuras emblemáticas de la música popular peruana. Para ello tuvo una variedad de seudónimos, siendo Trovador Ancashino y Bardo Aijino los que utilizó con mayor frecuencia.
De esta forma, habría ganado la admiración y el respeto del reconocido investigador y escritor José María Arguedas, quien sería una figura importante en la vida de Jacinto Palacios, pues fue uno de los primeros intérpretes que convocó para registrar sus repertorios y estilos musicales tradicionales, labor que dio inicio en 1947 desde la Sección de Folklore de la Dirección de Educación Artística en el Ministerio de Educación.
Una lista de estas grabaciones datadas entre 1949 y 1950, elaborada por el Ministerio de Educación Pública y correspondientes al departamento de Áncash, muestra queJacinto Palacios grabó 13 temas incluyendo huainos, tristes, yaravíes, marineras y danzas.
De este modo Jacinto Palacios se convirtió en uno de los primeros intérpretes de música ancashina cuyas grabaciones fueron consumidas masivamente.
Respecto a su trabajo como compositor, se le atribuye a Palacios Zaragoza la composición de una variedad de temas. El expediente presentado incluye una lista de 24 temas registrados en la Asociación Peruana de Autores y Compositores (Apdayc) en diciembre de 1983.
Esta lista incluye las chuscadas Adiós contento, Agarro mi guitarra, Atusparia, Cordillera blanca, Huanchaco, Lejos y ausente, Maldito quien dijo amor, El minero, Mujer andina, El obrero, Yerba buena, El zorro negro; los huainos Lágrima de Conococha y Todo se puede olvidar; los tristes y yaravíes Amor andino, Ingrata paloma, Palomita, Se va tu amante, El terrible, Yo soy como las palomas; las marineras Mi partida y El ruiseñor; el vals Te vi y te amé y el pasacalle Huay catay. A estos temas se añaden la marinera Me voy cholita y la chuscada Falsa Ilusión.
Muy reconocido en vida y gozando de gran prestigio, Palacios falleció en el distrito de Chavín de Huántar el 2 de diciembre de 1959, lugar donde fue enterrado hasta que sus restos fueron trasladados al distrito de Aija años después. Su obra se ha mantenido vigente en la memoria histórica y colectiva del pueblo ancashino, constituyéndose como uno de los pilares del actual repertorio emblemático que identifica a la región de Áncash frente al resto del país.
Muchas de sus composiciones como Todo se puede olvidar, Mujer andina, Luis Pardo y El zorro negro han sido inmortalizadas por algunos de los más grandes intérpretes de la música popular ancashina, destacando María Alvarado Trujillo (Pastorita Huaracina), Ernesto Sánchez Fajardo (Jilguero del Huascarán) y Angélica Harada Vásquez (Princesita de Yungay).
En el caso específico de Mujer andina, tema que compuso inspirado en su esposa, ha sido incorporado en el repertorio de intérpretes de otras regiones tales como Manuel Prado Alarcón (Manuelcha Prado) e Isidoro Berrocal Coronado (El Cholo Berrocal), e incluso a ser adaptada por intérpretes de otros géneros musicales de popularidad más reciente como la chicha y la cumbia.
La presente resolución se notificará a su familiares directos, solicitantes de la declaratoria, a la Dirección Desconcentrada de Cultura de Áncash y Municipalidad Provincial de Aija.
(FIN) TMC/MAO
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